Entonces en base a eso, al archivo sonoro y escrito, comienzan a saltar cosas que son realmente inadmisibles y que hoy pueden chequear cada uno de ustedes con solo hacer un clik en la computadora.
En el fragor por ver quien queda mejor parado frente a la sociedad ya se comenzó a mentir o a mostrar cuanto pueden caer algunos con tal de seguir viviendo del estado, aun cuando han estado haciéndolo desde que tenemos memoria.
Escuchaba en notas en distintos medios a un funcionario de la Municipalidad de Ushuaia, hablar de la provincialización de Tierra del Fuego, como un logro del peronismo, pero ese funcionario no estaba ahí, como otros “peronistas” que pedían la intervención del único gobierno peronista en esta provincia y que fue el de Carlos Martin Torres, y si dije gobierno peronista y el entrecomillado es porque no creo que sean peronistas y no tengo el peronometro, tengo hechos a las palabras ya no le doy importancia.
Lo que vino después fue menemismo, kirchnerismo, cristinismo o camporismo, en ningún caso peronismo, y hoy ese espacio no solo por las políticas, sino por los principios, las formas, la planificación, el ordenamiento de las cuentas públicas, la ayuda social, y la independencia económica a través de programas de desarrollo, en avicultura, porcinos, verduras y hortalizas, tecnología, capacitación y obra pública para la transformación de la ciudad lo encabeza el intendente Martin Pérez.
Ningún peronista que se reconozca como tal, se autocalificaría como integrante de esos espacios, sectores o grupos, desprendimientos del Partido Justicialista (PJ), que no obtuvieron beneficios personales dentro de la estructura y poco a poco fueron abandonando el peronismo.
Pero, aun sin ellos, el mayor movimiento político de América, ha sobrevivido y no será en este momento, cuando debe unirse para recuperar el lugar que hoy ocupa un cipayo, que se amontone con quienes tienen las mismas actitudes que los que hoy gobiernan, Si el presidente de eso que llaman PJ, dice en su discurso que “si vuelven, los vamos a recibir con los brazos abiertos, pero antes van a tener que comer mierda”, seguro que el PJ con ese dirigente no solo no se une, tampoco lo necesita y mucho menos lo respeta. Ese mensaje estaba dirigido a Martín Pérez y a Daniel Harrington, Intendente de Rio Grande y Tolhuín respectivamente y cabe señalar, que en Rio Grande, fue en el único lugar de la provincia, donde la derecha no ganó en las elecciones de 2023
El PJ de los dirigentes que gestaron la provincialización, no necesita de un presidente del partido que se lleve el partido a su casa, no necesita de compañeros que anden a los tiros, y tampoco de una gestión cuestionada por toda una sociedad y amañada a una reforma de carta orgánica que todos conocen y que solo generó más gastos.
Entonces, no hay interna en el PJ, hay quienes acompañan un proyecto del que deben hacerse cargo y explicar 9 años de gestión, y quienes creen que el PJ no es eso, y decidieron armar otro espacio y se fueron de ahí.
Pero, ojo con lo que se dice, no se aprovechen de los recién llegados para anotarse historias en el PJ, de las que no participaron, recuerden cuando le pedían la intervención, recuerden quienes viajaban a Buenos Aires a pedir que sacaran al gobernador.
Cuando se gestionaba una provincia con 55 millones de australes, y todo era ideas, proyectos, planificación, todo estaba por hacer, se tomaban decisiones políticas sin andar consultando a un dirigente que jamás vino a este lugar y de ese gobierno, ni un solo funcionario pasó, ni una sola vez por un juzgado, por ninguna razón.
Se que van a aparecer los que digan, no, no digas eso, ahora que necesitamos la unidad, etc, etc, no me importa nada, es la verdad, en ese gobierno de donde nació la provincialización, no había nada, todo se sacó adelante con mucha imaginación, con mucha austeridad, y quienes estaban ahí, saben que así fue. Seguro que querrán pintar la historia como les parezca para quedar mejor parados en el cuadro, pero la historia es una sola y lamentablemente para ellos yo la conozco, se de lo que son capaces y no le lustro el bronce a nadie.
Saben que se creó la carrera en la administración pública, saben que se otorgaron los últimos aumentos salariales al básico y que ese gobierno declaró persona no grata al embajador de los estados unidos, Terence Todman, por inmiscuirse en cuestiones de estado, ese era un gobierno peronista, esos hombres hoy son material de consulta, su honestidad es indiscutible, su compromiso irrefutable y su lealtad única, en cuanto a la defensa de los derechos de los fueguinos, de su autonomía, de su responsabilidad en el resguardo de la soberanía, los recursos naturales, la defensa de irrenunciable a la soberanía en las Islas Malvinas.
Ese es el peronismo que muchos están esperando ver, ya no mas cuentitos, acomodos, elecciones sospechosas, gastos imposibles de justificar, estafas, matones, amenazas, provocaciones y burlas, eso no es el peronismo, eso es una fantochada donde no hay espacio para las ideas, donde la justicia se encarga de encubrir cada fechoría, cada acto poco claro, donde quienes denuncias actos de corrupción terminan detenidos, donde dirigentes piden la cabeza de periodistas, o medios que no les son funcionales.
A ese peronismo, son pocos los que quieren sumarse, porque en definitiva, son mas de lo mismo, no aprendieron nada, no hay autocritica, vuelven a aparecer para la campaña, caminan un mes cada 4 años, no saben lo que pasa en la calle, no tiene empatía, no hablan con los medios porque tienen mas que ocultar que lo que tienen para mostrar, no escuchan a nadie, no reconocen errores, y siguen a quienes están procesados por corrupción, a quienes se llevaron un presupuesto, esos son sus referentes, entonces el peronismo no está ahí, no quiere estar ahí, no necesita de esa conducción, necesita políticos en serio que, lamentablemente hoy no están.
Cuando lean esto, seguramente habrá reacciones, quiero que sepan que después de haber soportado a Carlos Manfredotti 4 años como gobernador o a Jorge Martin 8 años como intendente y a muchos que hoy aparecen como nuevos, eso no me preocupa, como no me preocupa, cualquier cosa que digan, hace mucho que dejó de importarme, y no solo de este espacio político, de cualquiera que opine sobre lo que no le pido que haga.
Me distraen dirigente de verdad, serios, humildes, honestos, responsables, empáticos, austeros, cuidadosos de lo que representan. Todavía no puedo creer cosas que escucho, que veo y que no van por la misma vía, aunque salgan de la misma boca.
Este medio sobrevivió sin pauta, a muchos gobernadores, hoy podemos decir con absoluta tranquilidad que seguimos estando, como portal de noticias después de 25 años, en el mismo lugar, con la misma gente y trabajando como todos los días, si autobombo y con mucho para contar. Y lo mismo desde la radio donde en octubre de este año cumpliremos 37 años.
Armando Cabral