Los vuelos que se realizaron desde el inicio de la pandemia hasta hoy son llamados «especiales» porque requieren de la autorización de las autoridades nacionales y no forman parte de la programación habitual de las aerolíneas. Lo que cambiaría con el restablecimiento de los vuelos regulares es que las compañías podrían volver a disponer de sus itinerarios con los mecanismos habituales, lo que generaría una mayor previsibilidad tanto para ellas como para los pasajeros.
¿Qué tan firme está la fecha de reanudación que anticipó el ministro Meoni?
El ministro señaló que buscarán reanudar los vuelos regulares «entre el 12 y el 15 de octubre». Si bien hubo quien lo interpretó como una decisión tomada, en el Ministerio de Transporte aclararon que es «la intención» que tiene el ministro.
Así, la fecha tiene hasta ahora la misma solidez que otras fechas tentativas que habían sido anunciado por distintos funcionarios en el pasado y que finalmente no se concretaron, como el 1° de septiembre y el 1° de octubre. Sin embargo, señalan que en esta ocasión la intención está «bastante más firme» que en las oportunidades anteriores.
¿Junto con los vuelos regulares, se restablecería el transporte terrestre de larga distancia?
Según señalaron fuentes del Ministerio de Transporte, sí. La intención es que todos los servicios de larga distancia se reanuden en simultáneo.
¿De qué depende que la habilitación se concrete?
Fuentes oficiales consultadas sostuvieron que la decisión dependerá de la situación sanitaria del país, lo que definirá el aval final del presidente, Alberto Fernández. Para que la reactivación se concrete, deberá existir un escenario «estable» sanitariamente. «No hace falta que los casos estén en baja, pero sí que al menos no aumenten», detallaron.
¿Qué norma debería modificarse?
La suspensión de los vuelos regulares y el transporte interjurisdiccional está actualmente contemplado en el decreto presidencial que determina el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), cuya última prórroga vence el próximo 12 de octubre. Para que los vuelos regulares se reanuden deberán eliminarse esos puntos del decreto y, a partir de eso, los distintos organismos involucrados -Ministerio de Transporte, de Salud, de Relaciones Exteriores, la Administración Nacional de Aviación Civil- podrían avanzar con normas propias que articulen la reanudación de los servicios.
Si bien lo más esperable y lógico sería que se incluya alguna definición ya en el texto de la próxima renovación del decreto presidencial, en el Gobierno señalan que también es «técnicamente posible» que se prorrogue el decreto tal como está y que horas más tarde se dicte otro con las modificaciones.
¿Los gobernadores de cada provincia deben dar su conformidad?
Sí. La habilitación nacional de los vuelos regulares y el transporte de larga distancia no alcanza para que efectivamente vuelvan a todo el país. Cada mandatario provincial deberá expresar si está de acuerdo o no con recibir estos servicios en su territorio.
Si bien el mecanismo todavía no está definido, se espera que emitan una nota administrativa a las autoridades correspondientes en la que señalen su postura. «Aunque no nos sorprendería que algún gobernador lo comunique en un tuit», señalan.
Durante los últimos meses, solo dos provincias del país -Chaco y Tierra del Fuego- solicitaron frecuencias semanales a Buenos Aires, y ambas las obtuvieron.
¿Las provincias pueden establecer sus propios requisitos de ingreso?
Sí. Si quisieran, los gobernadores podrían imponer condiciones especiales para permitir el ingreso de pasajeros a sus provincias, como puede ser la obligación de hacer cuarentena o incluso de presentar el resultado negativo de un hisopado. De hecho, requisitos de ese tipo ya están vigentes en algunas jurisdicciones.
A nivel nacional, el protocolo coordinado por las distintas áreas del Gobierno, no exigiría la realización de un hisopado previo a los pasajeros, tal como dispusieron algunos países (por ejemplo, Uruguay).
En el Ministerio de Salud explican que un hisopado no garantiza que la persona evaluada no vaya a desarrollar después la enfermedad, dado que la puede estar incubando, y que puede generar una sensación contraproducente de «falsa seguridad». Por otro lado, tiene problemas de implementación, como su elevado costo, el tiempo de anticipación que demanda y las pocas horas de vigencia del resultado. De todos modos, no descartan revisar la decisión en caso de que lo amerite.
¿Quiénes podrían viajar? ¿Se incluirían turistas?
En caso de que se reanuden los servicios regulares de transporte de larga distancia, en una primera etapa solo podrían viajar las personas que tienen permisos vigentes para circular. Por ejemplo, los trabajadores esenciales.
«La vuelta de los servicios regulares no está relacionado directamente con el turismo, aunque sí es un paso en ese sentido. Va a servir a modo de ejemplo para probar el sistema y los protocolos, pero no está destinado al turismo en un primer momento», detallaron fuentes del Gobierno.
¿La reanudación de los vuelos implicaría una apertura de las fronteras?
No necesariamente. La flexibilización del cierre de fronteras es una decisión independiente que debe tomar el gobierno argentino y que tampoco resuelve las limitaciones impuestas por otros países.
Hay múltiples ejemplos que muestran que la habilitación de los vuelos no implica una flexibilización de las cuestiones migratorias. Por ejemplo, actualmente existen vuelos especiales de la Argentina a Europa y, sin embargo, los argentinos que no tienen ni residencia en Europa ni doble ciudadanía no pueden viajar. Del mismo modo, Brasil no tiene restricciones al transporte aéreo y sin embargo los brasileños tienen el ingreso vedado no solo a la Argentina sino a una larga lista de países, entre los que se incluye Estados Unidos.
Además, actualmente solo está permitido el ingreso a la Argentina de argentinos o residentes del país y eso no cambiará por el hecho de que se reanuden los servicios regulares, sino que demandará otra decisión del Gobierno, que puede ser simultánea o no.
¿El aeropuerto de El Palomar continuará activo?
Aunque estuvo varios meses en duda, fuentes del Ministerio de Transporte aseguraron que cuando se reanuden los vuelos El Palomar estará activo. Sin embargo, es una posibilidad que en un primer momento las operaciones de Flybondi y JetSmart -las dos aerolíneas que tienen base en esa terminal- queden reducidas a servicios de cabotaje.
Según pudo saber este medio, se evalúa derivar temporalmente todos los servicios internacionales al aeropuerto de Ezeiza, de modo que puedan concentrarse en un solo lugar los protocolos y medidas de cuidado vinculadas al tráfico internacional.
¿Aumentará la oferta de servicios?
Si bien es de esperar que con la reanudación de los servicios regulares se multipliquen las opciones de transporte, sobre en el interior del país, llevará varios meses que la oferta se acerque a la que existía antes de la pandemia.
Los itinerarios propuestos por las aerolíneas se diseñarán de acuerdo con el nivel de demanda, que continuará deprimida por muchos factores. Entre ellos, las limitaciones que seguirán existiendo para la circulación en el país y en el mundo, la inhabilitación del turismo y el temor al contagio de algunos pasajeros.
De hecho, en el Gobierno esperan que, al menos en el plano internacional, las frecuencias disponibles continúen siendo similares a las que ya existen bajo el sistema de permisos especiales. Según aseguran, en los últimos seis meses se realizaron más de 700 vuelos especiales, que trasladaron a más de 100.000 pasajeros en 60 compañías distintas, tanto nacionales como internacionales.