Trascendió primero como Plan B del oficialismo parlamentario ante el horizonte cada vez más certero de una derrota; fue admitido luego como una posibilidad por el jefe del bloque PRO en la Cámara de Diputados, Nicolás Massot; y en las últimas horas, finalmente, avanzaron formalmente las reuniones entre Cambiemos y el peronismo no kirchnerista en el Congreso para que el mega DNU que Mauricio Macri firmó el 10 de enero se convierta en varios proyectos de ley. La estrategia, sugerida por los jefes de los interbloques de Argentina Federal, Miguel Pichetto y Pablo Kosiner, fue abrazada por el oficialismo ante la posibilidad creciente de que el DNU naufrague en el Congreso.
Ayer, Massot recibió en su despacho a los diputados Pablo Tonelli y Fernando Iglesias, dos de los oficialistas que tendrán la misión de defender el mega DNU en la bicameral que analiza esas disposiciones presidenciales. Momentos después, Cambiemos oficializó la convocatoria a la comisión para el martes próximo a las 15:30 en el Salón Illia del Senado. «Nuestra intención es el martes discutir el decreto y sacar dictamen», adelantó Tonelli en diálogo con El Cronista. Para terminar de coordinar la estrategia, hoy los diputados de Cambiemos tendrán una reunión con funcionarios del Ejecutivo.
Así, la alternativa de cambiar el DNU por proyectos de ley avanzará por un carril paralelo. «Quedaría para después, según como queden las cosas», definió Tonelli al respecto. El oficialismo ajustará el termómetro para ir evaluando la necesidad de apurar o no el paso en función de la presión que haga el peronismo.
Los rechazos a la decisión presidencial florecieron en todo el arco opositor del Congreso. El PJ-Frente para la Victoria, el interbloque Argentina Federal, el Frente Renovador, el Movimiento Evita y el Frente de Izquierda y los Trabajadores son algunos de los sectores que adelantaron su rechazo al DNU. El massimo, además, llevó el tema a la Justicia; aunque no consiguió que le habilitaran la feria para tratar la denuncia, así que la presentación se activará recién mañana.
Fue esta amalgama opositora la que convenció al oficialismo de la necesidad de desdoblar el DNU en varios proyectos de ley y negociarlos con el peronismo. Los bloques de Pichetto y Kosiner ya le hicieron saber a Cambiemos que están dispuestos a discutir esas eventuales iniciativas, pero que no pondrán sus votos a sostener el decreto si el DNU termina llegando al recinto, como se proponen el kirchnerismo y el massismo.
Sin embargo, y a pesar del envión opositor, rechazar un DNU en los recintos no es un trámite rápido ni sencillo. Por eso, y porque Cambiemos está muy cerca de asegurarse el éxito en la bicameral adonde quedará en paridad con el resto de la oposición y, muy probablemente, contará con la presidencia para que desempate a su favor, el oficialismo avanzará sin desesperación hacia los proyectos de ley. La primera discusión se verá el martes por la tarde. Allí los rivales medirán fuerzas y evaluarán cómo seguir.
Cronista
