Incluso hasta se fogonea desde algunos ámbitos, el juicio político o la destitución del gobernador, una muestra de una ignorancia supina y sumamente peligrosa, en un momento donde la libertad es mentira y los derechos han desaparecido. Hablar de destituciones, o juicios por un documento, es mucho, es peligroso, es irresponsable, es desconocimiento de la institucionalidad, pero sobre todo, una clara señal de intolerancia y ubicación a la derecha que preocupa. Preocupa porque el poder judicial feudal que tenemos en Tierra del Fuego, se ha metido a hacer política y en su afán de colocar a uno de los integrantes del Superior Tribunal, en el gobierno, y a su hermano en la municipalidad de Rio Grande, no van a parar, no van a respetar ni la constitución, ni las leyes, van por la suma del poder, y esto pareciera que es lo que muchos acompañan, diciendo, «NI», eso es cuidar intereses particulares, personales, la quintita propia y el resto que se joda,
Las denuncias de un abogado de nuestra ciudad, contra dos ex legisladores de la anterior gestión, y una ministra de la actual gestión de gobierno, se parecen mucho a eso.
Según los abogados que patrocinan a Mónica Acosta, una de las denunciadas y a Emanuel Trentino quien no recurrió a defensa alguna, ambos casos encuadran perfectamente en lo normado por la Ley de Ministerios.
Acosta patrocinada por los doctores, Raúl Aciar y Federico Rauch, exigió una disculpa pública del abogado del foro local y presentó documentación probatoria, donde explica y prueba que nunca ocupó el cargo que, según la denuncia, habría sido mal designada. Incluso los abogados señalaron a Resumen Económico, que se trató de un error administrativo que fue subsanado de inmediato, pasando a ocupar una secretaría encuadrada en el cronograma del poder ejecutivo provincial
Por su parte Emanuel Trentino, renunció a la Secretaria de Enlace Legislativo, el 29 de diciembre de 2023 y fue aceptada por la vicegobernadora Mónica Urquiza, tampoco ocupó el cargo del que se lo acusa y si bien aún forma parte del ejecutivo, lo hace ocupando una secretaria, también encuadrada dentro de la ley de ministerios.
Lo mismo ocurre con la Ministra de Obras Públicas, Gabriela Castillo respecto de su firma en el decreto de convocatoria a elecciones convencionales, que se iban a realizar en 10 de noviembre de este año. Todos los casos denunciados por el mismo abogado de Rio Grande y refutadas por los abogados patrocinantes de los tres funcionarios antes mencionados.
Estas situaciones se parecen mucho al titulo utilizado para esta nota, porque puede ser que hayan sido designados, pero, nunca ocuparon los cargos en los cuales se los quiere hacer figurar, ni recibieron pagos por los mismos. Y aun si fuera así, hoy hay cosas mucho más graves que pasan en la provincia que, dejan a este caso en el subsuelo, dicho por los denunciantes, solo que la pobreza y la indigencia, se utilizan cuando les beneficia a ellos, pero tampoco hacen un carajo para aliviar la situación de nadie.
Ni Acosta, ni Trentino, ocuparon esos cargos, la renuncia del legislador que publicamos aquí es una prueba irrefutable de eso, y esta no es un defensa de ninguna de las tres personas involucradas en este hecho, de eso se encargan los abogados que los patrocinan, Raúl Aciar, Federico Rauch, y Raúl Paderne en el caso de Castillo. Esta última no ha emitido palabra al respecto, pero su abogado si, y de hecho ha sido más que claro respecto de los argumentos de su clienta y la documentación aportada.
En síntesis y hasta que la justicia entienda lo contrario, todos son inocentes de los cargos de los que se los acusa, pero, siempre hay un pero, la mediatización de estas y otras denuncias, provocan un juzgamiento social, que algunos medios tratamos de evitar, porque detrás de los denunciados hay familias, amigos, que, en la mayoria de los casos toma postura a favor o en contra, sin que la justicia se haya expedido y todos sabemos que los jueces son muy permeables a las cuestiones mediáticas.
Por todo esto, quienes no cubrimos judiciales, pero tenemos algo de sentido común, no podemos menos que expresar, que lo que hoy les pasa a ellos, mañana nos puede pasar a nosotros, si todo lo que vamos a aportar son nuestras diferencias personales, ideológicas o políticas, para llevar adelante denuncias que, después, son casi imposibles de probar, estamos más complicados de lo que parece.
Todos conocemos como funciona la justicia en nuestra provincia, y también como se ha manejado últimamente, mal podríamos sumarnos a este circo, sin tener en cuenta los antecedentes, de un manejo sin precedentes, después de enviar un allanamiento a la casa de gobierno, algo que no ocurría desde 1995, hace 29 años, y mucho menos por la supuesta firma errónea de un documento público.
Es un dislate, en una provincia, donde la institucionalidad sufre de una efervescencia pocas veces vista que, como dijimos anteriormente, por una denuncia, de un abogado y las declaraciones de un legislador, se fogonee, el juicio político, la destitución, pidan renuncias y haya quienes además de aplaudir, dejen que esto suceda sin poner palabra, a veces pareciera que aplica esta regla de “cuando no hay nada que decir mejor no decir nada”, así llegamos al golpe de 1976, por partidos de derecha, y que decían que no lo eran pero finalmente se les cayó la careta, medios serviles, y voceros del desastre, que sumaron para generar la mayor tragedia de la historia argentina.
Cuidado con esos que nunca sabemos de qué lado están, este no es un momento para ir por la ancha avenida del medio, se está o no se está, para la defensa de los derechos, la institucionalidad, la democracia, y la soberanía. Empecemos a ver quienes son los voceros de “con las botas estábamos mejor” y lo que hacen gala del no te metas, esos son los peores, ya los vimos actuar antes del golpe de estado de 1976, no volvamos a cometer errores de los que nos vamos a arrepentir toda la vida.
Armando Cabral
