Distintos sectores de la ciudad, completamente congelados por las bajas temperaturas que rozaron los 20 grados bajo cero.
Hasta ahora es uno de los invierno más crudos, desde 1995, cuando además de muy bajas temperaturas, se aumuló, casi un metro de nieve. En aquel momento la temperatura mas baja fue de 22 grados bajo cero.
Este invierno, la ciudad sufre, una disminución en el caudal de agua potable, que según Obras Sanitarias, se debe a que muchos vecinos dejan las canillas abiertas para evitar el congelamiento.
Por otro lado también se registra una baja de presión de gas y pérdida del poder calórico por el alto consumo.
Finalmente y como suele ocurrir en esta época del año, el estado de las calles y la falta de precaución al conducir, se han producido decenas de despistes que han provocado muchas pérdidas materiales y varios conductores enviados al hospital para revisión, pero que en la mayoria de los casos no revisten mayor gravedad.
Aun restan casi tres meses de invierno y desde aquí recomendamos, cuidar el agua, conducir con precaución y evitar dejar hornallas encendidas u hornos de la cocina para calefaccionarse por posibles intoxicaciones con monóxido de carbono.