En la industria aseguran que las discusiones están encaminadas y que «el acuerdo está prácticamente cerrado«. La operación contempla el traspaso y la continuidad de dos plantas y 526 empleados directos, un tema extremadamente sensible para el gobierno provincial, los sindicatos y las dos marcas que dependen de sus servicios.
Las versiones sobre la retirada de Brightstar circulan desde hace un mes. Ayer, la compañía confirmó oficialmente que estaba buscando «un socio estratégico» para traspasarle los activos, en el marco de una estrategia global de «desinvertir en algunos mercados, entre ellos la Argentina». La decisión de hallar un comprador se aceleró en las últimas horas y los esfuerzos se concentraron, casi exclusivamente, en el grupo Mirgor, que también produce y distribuye celulares y TV para Samsung.
La salida de Brightstar causó conmoción y sorpresa en la isla. No así su posible nuevo dueño. Mirgor es conocida porque uno de sus accionistas es Nicolás Caputo, uno de los mejores amigos de Mauricio Macri. Pero también porque tiene 3 plantas, lidera el ranking de empleo industrial (2.278) y en la producción de celulares (casi 1,6 millones sobre un total de 3,7 millones de unidades en el acumulado a setiembre). El interés de Samsung es lógico.
Mirgor es un estrecho aliado de la marca coreana. No sólo le produce celulares y TV, sino que además es dueña y administradora de 50 Samsung Store, los puntos de ventas propios. Samsung tiene una alianza parecida tiene con Visuar, la empresa con la cual fabrica heladeras, lavarropas y microondas en Cañuelas. Por todo eso, altos ejecutivos de la marca seguían minuto a minuto el desenlace de las negociaciones.
Al cierre de esta edición y luego de varias horas de charlas, que incluyeron directivos de la casa matriz de Brightstar, las posiciones se habían acercado. «El trato es inminente, la continuidad de la empresa está asegurada y se comunicaría en las próximas horas«, señaló a este diario uno de los participantes. El principal temor, a nivel provincial y nacional, era el futuro de los empleados. En la industria creen que Brightstar no está sobredimensionada ni tiene deudas. Un funcionario provincial razonó: «De los 526 empleados, sólo 405 son efectivos. El resto son contratados. Si tenés problemas, lo primero es cancelar contratos. Y después abrís un retiro voluntario. Nada de eso pasó en este caso».
Fuente:clarin.com