Tras señalar que “lo que indica el embajador británico Mark Kent (en torno a la supuesta conveniencia de la pesca conjunta en Malvinas, entre la Argentina y el Reino Unido) no es una actitud novedosa porque es lo que viene pregonando ya desde los acuerdos de Madrid, en el ‘89/90’; es decir, tratar de hablar sobre temas prácticos que les conviene simplemente a ellos, sin abordar el tema central que es el de la soberanía”.
El funcionario consideró no obstante que “lo que dice el embajador británico es llamativo, cuando menciona que si no se trabaja en conjunto nos vamos a quedar sin pesca, haciendo referencia a los británicos y a los argentinos”.
En ese sentido sostuvo que “lo que debería decir el embajador británico es que si no trabajamos en conjunto ellos se van a quedar sin pesca, no nosotros; ya que los que están en una situación complicada, por su salida de la Unión Europea y la imposibilidad que va a tener para ingresar los productos que ilegalmente sustraen de nuestro mar”.
Rodríguez observó que “se ahí surge la preocupación del embajador, tratando de genera una cuestión bilateral cuando en realidad es únicamente de ellos”.
“Lo que nos están pidiendo es ayuda en una situación de dificultad y debilidad internacional que tienen con su salida del Brexit y, lamentablemente, lo que hace el gobierno nacional es escuchar ese pedido de ayuda y, por lo que estamos viendo desde el acuerdo Foradori-Duncan del 2016, está accediendo en todo lo que se le está solicitando”, fustigó.
El Subsecretario de Cuestión Malvinas observó que, no obstante, que “eso fue lo que definió en el acuerdo Foradori-Duncan: tratar todos los temas que le interesan al Reino Unido y no tocar en absoluto los temas que le interesan a la Argentina”.
“El acuerdo es puramente reconocerles y facilitarles los aspectos prácticos, como ellos le llaman, alrededor de las islas; es decir lo que es comunicaciones, vuelos, pesca e hidrocarburos”, dijo, para anotar que “son todos acuerdos que la Argentina en su momento había logrado con el Reino Unido, pero que se suspendieron por los actos constantes y unilaterales del Reino Unido; y que de forma inentendible se están volviendo a reanudar”.
Tras ratificar que dichos acuerdos son “tan lesivos como los eran antes”, Rodríguez señaló que “desde nuestra Secretaría hemos venido elevando notas y pedidos a la Cancillería Argentina, manteniendo nuestra posición de claro repudio a este accionar, y solicitando se nos informe cuál es el motivo por el que se está llevando a cabo la reanudación de la cooperación en materia pesquera”.
Además se pretende saber “si es verdad que se van a reanudar estos mecanismos de cooperación en materia de hidrocarburos porque recordemos que hay una ley nacional que le prohíbe hacerlo a empresas que están realizando tareas de exploración y/o explotación en las aguas en disputa y que no cuenten con la autorización de la Argentina”.
Consideró que “si el gobierno nacional quiere avanzar en esa cooperación en materia de hidrocarburos va a tener que buscar la derogación de la ley 26659, que es la que lo prohíbe”.
Por otro lado, Rodríguez consideró que en la nota que dio el embajador británico al diario Clarín “hay un reconocimiento tácito de la existencia de la disputa de soberanía; porque en un momento menciona que ‘aparte de la disputa de soberanía, tenemos que sentarnos a hablar de la pesca…’, con lo cual, por primera vez en este último tiempo hay un reconocimiento en tal sentido”.
“Aparentemente al embajador le ha caído un manto de realidad y se ha dado cuenta de que la única forma de avanzar en la relación bilateral, de manera real y de buena fe, es sentarse y discutir la cuestión central de la relación que hoy existe, y que es la disputa de soberanía”, señaló.