Pese a que le propusieron ocupar algún otro cargo, lo más probable, según pudo saber este diario, es que dejará la función pública y buscará reinsertarse en el sector privado. Antes de sumarse al gobierno de Cambiemos, Werning era director ejecutivo para América Latina del JP Morgan.
En los hechos, Werning era la mano de derecha de vicejefe de gabinete Mario Quintana, quien con el ascenso de Dujovne perdió ascendencia sobre las decisiones tanto en política económica como en política monetaria.
Puntualmente sobre la labor del Banco Central, Werning era un convencido de que la política de tasas de interés que venía aplicando el BCRA era demasiado rigurosa.
Eso se buscó corregir, precisamente, con la recalibración de metas de inflación del 28 de diciembre de 2017. Y para muchos, tal decisión fue una de las causas que desató la turbulencia cambiaria de abril.
Werning era insistentemente mencionado cuando se hablaba de fricciones entre Jefatura de Gabinete y el Banco Central o Hacienda.
En diciembre pasado, se lo señaló como el principal impulsor de la recalibración de las metas de inflación. Hasta la semana pasada, circulaban versiones de que podía llegar a integrarse al directorio del Banco Central, y no se descartaba la posibilidad de que pudiera reemplazar al propio Federico Sturzenegger.
Werning había llegado a la Jefatura de Gabinete en enero de 2016, proveniente de Hacienda. De allí se había ido junto a Alfonso Prat-Gay, quien lo había convocado en 2015 para sumarse a su equipo.