El malestar se hizo sentir de inmediato en la cúpula gubernamental y más rápido que ligero se decidió que nadie con ganas de decir verdades participe del encuentro del concejo asesor cuestión Malvinas y solo ingresaron 6 personas y no estuvieron ni la gobernadora ni el ministro del Interior Rogelio Frigerio que vuelve a derrapar de manera notiria al momento de imponer una política exterior de entrega que ya genera malestar entre propios y extraños. Al respecto esto publico el diario Tiempo Argentino en su edición de hoy
“El periplo sureño de Rogelio Frigerio debe ser tan limpio como las límpidas aguas del canal de Beagle, más este 2 de abril, cuando arribe a Ushuaia para participar, junto a la gobernadora fueguina Rosana Bertone, del acto oficial por el trigésimo sexto aniversario de la guerra de Malvinas. Mientras el gobierno nacional pondera las virtudes del diálogo con Gran Bretaña, con polémicos acuerdos de explotación pesquera e hidrocarburífera bajo el poncho, y barre bajo la alfombra el reclamo de soberanía, que ya rara vez se cuela en el discurso de Cambiemos, el ministro del Interior preferiría no oír a quienes acusan a la gestión Mauricio Macri de “desmalvinizar”, y todo indica que la mandataria provincial -electa por el Frente para la Victoria pero cada vez más alineada con el oficialismo- procura despejarle el camino.
Durante la semana había sesionado en la Carpa de la Dignidad, en Río Grande –donde anoche y esta madrugada se realizó una multitudinaria Vigilia-, el Consejo Asesor del Observatorio Cuestión Malvinas, un cuerpo colegiado provincial creado en 2010 que se ocupa de hacer un seguimiento permanente de los avances y retrocesos sobre el tema, y que integran funcionarios, dirigentes partidarios, ex combatientes y organizaciones de la sociedad civil fueguina. En esa oportunidad, y en vísperas de un nuevo 2 de abril, varias voces se alzaron contra la “hoja de ruta” presentada en septiembre de 2016 por la entonces canciller Susana Malcorra, evidenciando la fuerte preocupación sobre los alcances de los llamados “acuerdos Foradori-Duncan” y en qué medida suponen desconocer la Declaración de Ushuaia, que ratifica la soberanía argentina sobre las islas. En representación de los veteranos, Daniel Guzmán pidió avanzar en declaraciones efectivas contra el “saqueo” que, entiende, se quiere perpretar en Malvinas. “O este Observatorio se pone al ritmo de las circunstancias o vamos a decir que este es un club de viejas gordas para comer masitas y hacer catarsis”, aguijoneó.
Está previsto que el Consejo sesione este lunes en Ushuaia, en plena conmemoración, pero la gobernadora Bertone no quiere malos tragos con el ministro de visita, y decidió reducir unilateralmente la lista de asistentes.
El ex combatiente Guzmán, que además fue electo vocero del Consejo, y otros miembros críticos de la “desmalvinización”, como Federico Greve, del partido FORJA (que lidera el intendente de Río Grande, Gustavo Melella), o Moisés Solorza, secretario gremial de los Petroleros Jerárquicos (e impulsor del “frazadazo” que a mediados de 2016 respondió a los dichos de Frigerio sobre quienes en la Patagonia “andaban en remera porque el servicio de gas era gratis), fueron literalmente “bajados” de la reunión, alegando cuestiones procedimentales, que sus nombramientos no habían quedado debidamente registrados en las actas del organismo y otros pretextos burocráticos.
Cuando este lunes a las 10, antes del acto oficial del que participará Frigerio, se reúna el Observatorio Cuestión Malvinas, a varios de sus miembros –que hasta fueron eliminados del grupo de Whatsapp- podrían dificultarles el ingreso. En su fuerte discurso en el cierre de los actos de la Vigilia riograndense, el ex combatiente Guzmán le advirtió a la gobernadora Bertone que no se callarán y estarán en Ushuaia”.